La Ciudad como Sistema y la Patología Urbana
La ciudad, como todo sistema, genera un resultado que es mayor que la suma de sus partes. En función armónica produce ideas, arte, danza, filosofía, poesía, atmósfera agradable y palpita de vitalidad creativa y desarrollo dinámico. En función inarmónica y caótica genera intensidad de crimen, congestión, caos, depresión, frustraciones, fealdad, y aunque produzca ideas, arte, danza y música, la calidad de esos productos será fiel reflejo del caos que reine en su corazón, y en su alma. Adicional a ello, el desequilibrio económico la ahoga con cinturones de marginalidad y pobreza. Y así vemos cómo la entropía, producto la nefasta práctica de aplicar la excepción como norma y la norma como excepción, se ha apoderado de ella pues dejamos de reforzar los vitales puntales de calidad de vida que la conforman, para reconducir los nutrientes económicos a otros objetivos de menor prioridad. El siguiente cuadro nos muestra algunas variables rara vez consideradas, las cuales inciden con serio impacto en nuestro modelo urbano de desarrollo:
Se han aplicado medidas en pro de la ciudad a lo largo de los últimos años con acciones puntuales, pero las acciones puntuales en un sistema generan resultantes impredecibles, por causa del “Efecto Mariposa” de Lorentz. Esa entropía si no es revertida a tiempo, puede generar colapsos en diversos puntos del sistema cuya remediación resultará enormemente costosa en recursos humanos y materiales. Esto es lo que arquitectos y urbanistas llamamos Patología Urbana. El problema básico es que la ciudad es un sistema dual: Las acciones y medidas se tienden a enfocar en la ciudad física, disponiendo más recursos para más objetos, como si la cantidad generara calidad: Más motos para la policía, más viviendas y hospitales, o más avenidas. Pero tenemos la otra ciudad; la ciudad social, que está conformada por la gente, por sus intereses, sus hábitos y relaciones de vida, su conducta colectiva. Es la conducta de su gente lo que la hace cálida y acogedora, atractiva y disfrutable. Pero una población enajenada, incluyendo a sus planificadores y gobernantes, no puede generar una ciudad viva, dinámica, saludable, sino caótica. Y pueden creerme, los funcionarios ineptos o corruptos están tan afectados por este caos como nosotros. Es por esto que las corrientes del Nuevo Urbanismo analizan la planificación de la ciudad desde el punto de vista del Metabolismo Urbano[ii] tratando a la ciudad como un organismo vivo, con su flujo de nutrientes, de energía nerviosa, de voces y pensamientos, de bienes y servicios vitales; y como tal debemos tratarla, para poder mantenerla en el mejor estado de salud.
Una de las conclusiones más dramáticas de la realidad estadística actual es que el crecimiento exponencial de la población ha alcanzado un punto más allá del cual ninguna de las grandes capitales rodeadas de cinturones de miseria podrá tener jamás los recursos materiales, ni el tiempo necesario, ni la voluntad política, ni los recursos técnicos para eliminar los cinturones marginales. Ni siquiera la solución de los extremistas radicales de arrasar los ranchos con tractores y reconstruirlo todo desde cero es materialmente posible. Y desde el punto de vista sociológico es impensable. Esto se torna decepcionante y obvio en Caracas. Y nos obliga a enfrentarnos a una cruda realidad: tenemos que resolver el problema progresivamente in situ.
Ciudad Sustentable y Resistencia al Cambio
En el año 2009 varias agencias internacionales indicaban que el 75% de la población latinoamericana habita hoy en ciudades. Sin detenernos a estudiar las causas de ese fenómeno, vemos que solucionar la ciudad se torna inevitable, y debemos ver algunas estadísticas para apreciar el tamaño del problema que tendremos que enfrentar desde hoy hasta el 2030. Veamos algunos de los desafíos socio-económicos, técnicos y financieros de una Gestión Integral para Caracas, cuando proyectamos las actuales tendencias:
CARACAS, Distrito Metropolitano (fuentes varias) | 2010 | 2030 |
Población total | 3.715.000 | 6.330.000 |
Población en desarrollos no planificados | 1.560.300 | 3.798.000 |
Volumen de desechos sólidos | 1.368.750Ton/a | 2.317.750Ton/a |
Dotación de agua corriente por UV consolidada | 3,91m³ | 0,48m³ |
Déficit de viviendas | 350.000 | 560.700 |
Vehículos en circulación | 937.000 | 1.683.000 |
Velocidad promedio de circulación | 14,43km/h | 4,38km/h |
Tasa de homicidios | 140…/100.000h | 388…/100.000h |
Fuentes: Wikipedia, INE, Mater Natura ONG. Estimados parciales de data incompleta.
Es de notar que en Junio de 2010 se cumplieron 38 años de la Conferencia de Estocolmo y a pesar de los denodados esfuerzos desde entonces, desde el Informe Brundtland de la Conferencia de Río, pasando por la fundación del MARNR en 1977, hasta la creación del IPCC (Panel Internacional para el Cambio Climático), y la Conferencia de Copenhagen, la curva de nuestra Huella Ecológica ha continuado creciendo y el grado de deterioro de los ecosistemas sigue agravándose como lo indica el gráfico. En Venezuela podemos apreciarlo en que, salvo en remotos rincones de nuestra geografía, ya no hay ríos limpios. Las razones de este fracaso no tienen que ver con que seamos ignorantes respecto a las medidas que debemos poner en práctica. Suficientes profesionales tienen años pronunciándose al respecto. Tampoco tiene que ver con falta de evidencias de lo que está sucediendo a nivel ambiental ni urbano, pues cualquiera de las páginas de la prensa o la TV, nos lo machacan a diario. No necesitamos muchos estudios profundos para darnos cuenta del grave deterioro del Embalse La Mariposa, por ejemplo, ni análisis de efluentes para conocer la baja calidad del agua del Río Guaire, ni estudios criminológicos para darnos cuenta del absurdo sistema carcelario o de la seguridad.
Venciendo la Resistencia al Cambio
La Resistencia Al Cambio (RaC), podemos definirla como la inhibición parcial o total de acción de quienes toman decisiones, y que impide que cualquier medida de solución a un problema determinado se aplique eficiente y oportunamente. Se expresa en Biología como homeóstasis y es una respuesta natural de los seres vivos cuando ven amenazada la estabilidad de su estructura vital. Sin embargo resulta irracional cuando el individuo conoce todos los factores que apuntan hacia un cambio y sin embargo continúa resistiendo. Las manifestaciones de esa resistencia ante las posibilidades de cambio son variadas. Entre ellas encontramos el rechazo a la autoridad (“síndrome de rebelde sin causa”), la contra-rivalidad (negarse a cumplir instrucciones de un adversario profesional, político o ideológico), la arrogancia (por creerse superior a quien o quienes reclaman o exigen dichos cambios), la suspicacia (recelar porque pudiera haber algún motivo oculto para solicitar dichos cambios), “posponer la sentencia” (tratar de ganar tiempo con la esperanza de que el cambio termine resultando innecesario), pero una de las más poderosas es el riesgo de perder conquistas alcanzadas, sean estas económicas, sociales, familiares, afectivas, políticas, institucionales, etc. En general el individuo rechaza el riesgo o amenaza de perder su estilo o calidad de vida, lo que él denomina progreso. Sin embargo los cambios que requiere la ciudad ante el desafío presente exigen redefinir lo que entendemos por “progreso”.
¿En qué tipo de cambios queremos evitar la resistencia? La 2ª Ley de Termodinámica es irrefutable. Sin embargo hay mecanismos que contrarrestan la entropía y la revierten hasta constituir sistemas que crecen. El mejor ejemplo es un bebé. Y la razón por la cual un bebé revierte la entropía es porque en él actúa desde la concepción otra función constructiva que es la Gestación, propia de los sistemas orgánicos, que es más fuerte que la entropía y que en la vejez termina debilitándose hasta que ésta termina avasallándola. Pues bien, mientras la Gestión Integral estimule, promueva y auspicie la gestión de ideas, arte, agricultura, artesanía, vida cultural, es decir que el Metabolismo Urbano se mantenga sano, la Ciudad crecerá sana, multiplicará sus creaciones y podrá exportar al mundo sus creaciones en términos de turismo, arte, filosofía, enseñanza, ciencias, música. En este último caso el soberbio Programa de Orquestas Juveniles es el mejor ejemplo que viene a mi mente de gestación continua de nuevas gestaciones. Está permanente contrarrestando la entropía. Y ese mismo método podemos aplicarlo a todos los renglones de la gestión municipal. Este podría ser el nuevo cambio; del modelo caduco a un modelo de Gestión Integral con participación masiva.
Reducir o vencer la RaC es una condición sine qua non para siquiera aspirar a una gestión cualquiera, mucho más un plan innovador y ambicioso como el de esta misión que estamos asumiendo. Reducir la RaC requiere una campaña masiva de educación cívica, y lo interesante es que podemos obtener los medios para lograrlo de forma efectiva y casi gratuita[i]. Por eso cobran importancia capital para esta gestión, los talleres de participación, para formar las necesarias generaciones de relevo que le puedan dar continuidad y optimización a la Gestión Integral, y evitar que sucumban a las presiones del facilismo, de la corrupción, del parasitismo político, y de la apatía vecinal, lo cual generará los temidos bucles de refuerzo negativo. Estos bucles son conocidos para los ingenieros de sistema y actúan de freno, que a su vez inducen mayor resistencia, la cual producen un freno aún mayor, y de nuevo una resistencia aún más cerrada reforzándose de nuevo sucesivamente, y cada vez más fuerte. Esta RaC se manifiesta bajo tres situaciones básicas:
A.- El individuo conoce el problema y su importancia, más tiene temor a aplicar las medidas por recelo o por ignorancia de que eso sea lo más adecuado.
B.- El individuo desconoce el problema y su importancia, y solo obedece instrucciones de evitar aplicar las medidas, o piensa que rehusándose defiende valores o instituciones, grupos, o ideologías. Generalmente esperan reconocimiento por ese gesto.
C.- El individuo conoce el problema y su importancia pero rechaza las decisiones de aplicar las medidas por rivalidad, envidia, o temor de quedar en evidencia como poco capacitado, o negligente al no haber atendido el problema. (Existe también una situación “D”).
En el primer caso la RaC podrá vencerse con información adecuada y oportuna. Es obvio que este método es similar al de mercadeo de un producto nuevo y desconocido. La posibilidad de demostrarle a los funcionarios que la aplicación de algunas medidas le dará reconocimiento igual o mayor que el que el esperaba resistiendo, y que estará defendiendo valores aún mejores y mayores que aquellos que creía válidos, es una táctica para superar estas barreras.
Algunas Variables de la RaC
V1 Apatía Vecinal:
Inhibición de la participación (determinante)
V2 Incapacidad Parásita:
Falta de educación formal en asuntos de su competencia
V3 Oposición Política, sabotaje:
Rechazo a priori de propuestas de rivales
V4 Priorización Errada, Efecto 24:
Jerarquización errónea de prioridades (alto impacto mediático y bajo poder correctivo)
V5 Ping-Pong, Omisión, “Ni-Lava-Ni-Presta-La-Batea”:
Evadir responsabilidad, omisión, apatía, manipulación etc. Se conoce como”Peloteo”
V6 “Vender El Sofá”, “Matar al Mensajero”:
Erradicación de evidencias en vez de erradicación del problema
V7 Quórum Filtrado, Convocatoria débil, Consulta Simulada:
Convocatoria focal dirigida a un grupo selecto sobre decisiones ya aprobadas.
V8 Favoritismo Político:
Atención exclusiva a partidarios, favoritos o a intereses creados
V9 Falsas Promesas:
Ofertas económicas, o legales imposibles de cumplir o exageradas
V10 Complejo de ETI:
Complejo de Extra-Terrestre Incorregible, Fatalismo Permanente.
Hemos tomado solo diez de las muchas variables factibles de ser consideradas en una labor de concienciación o educación cívica; una especie de “alfabetización política”, que no es más que la instrucción del ciudadano común para que aprenda a reconocer la manipulación política, gran herramienta de proselitismo electoral en nuestro país, mientras les enseñamos a evaluar la carrera, trayectoria y voluntad de trabajo de sus líderes políticos.
Reinaldo Martínez CONSULTOR AMBIENTAL DIPLOMADO, UNIMET.
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